Los buenos ejemplos

En un momento en el cual vemos, con preocupación, como el volumen de ventas de dorada se desploma algo más de un 20%, aunque se reconoce que como consecuencia de un descenso en la producción y una modificación de los canales de distribución.

En un momento en que la subida del IPC del 2,4% del pescado fresco, frente a una situación que para el consumidor podemos decir no es del todo propiciatoria y que por supuesto no ayuda.

En un momento en el cual, sin embargo, las importaciones siguen siendo elevadas y el consumo en general, aunque retraído, no parece tan bajo como los datos que nos dan.

En este momento, sigue siendo esperanzador encontrar reseñas como la publicada en IPAC donde se hace referencia al estudio de Nofima en el cual la acuicultura es mucho más que una suministradora de alimentos y generadora neta de empleo directo, ya que se produce un fenómeno de agregación de los servicios derivados y sobre todo una generación de empleo y valor “no visible” que viene a ser todo lo que necesitan las instalaciones para realizar su actividad, como mantenimiento, servicios de buceo, transporte, alimentación, construcción naval, equipos,… y lo que también es muy importante servicios especializados que están dando lugar a nuevas empresas de salud, control medioambiental, genética, ensayos y vigilancia.

Estos buenos ejemplos, procedentes de un país maduro como Noruega, con una industria saneada que sigue creciendo, la del salmón, tiene que ayudarnos a entender que existen otros modelos de hacer acuicultura y que esos modelos, aunque evidentemente no pueden ser copiados, si que han de servir para tomar nota. Seguro que hacemos muchas cosas bien, pero ¿qué estamos haciendo mal para que la iniciativa privada no acabe de darse cuenta que este sector industrial es mucho más?.

Mas buenos ejemplos a destacar, lo bien que los trucheros están publicitando la trucha como alimento excelente (ver vídeo de TV1) y hacen de ella protagonista culinaria, o la extraordinaria iniciativa de que la acuicultura sea la protagonista de la XI edición de Madrid Fusión, en su sesión “agua”.